El marketing de masas, que imperó durante décadas, ha ido cayendo en desuso progresivamente. De forma paralela, éste ha sido reemplazado por otras formas de marketing y hoy en día, especialmente, por el marketing sensorial. En este artículo analizaremos los motivos de esta evolución y las diferencias entre el marketing de masas y el marketing sensorial.
El marketing de masas fue ideado para llegar a “todo el mundo”, mediante su difusión en los medios de comunicación de masas, especialmente la televisión, la prensa y la radio. Durante muchos años, la población estaba atenta a estos tres canales de información ya que eran los únicos desde los que informarse. Nadie escapaba de la publicidad que allí se emitía, y cada anuncio llevaba a millones de personas.
A medida que han ido apareciendo más avances tecnológicos, los canales de información se han ido ampliando de manera exponencial. Nos referimos a las redes sociales, así como a muchos otros canales temáticos de deportes, naturaleza, hogar; webs que recogen series y películas online; blogs, páginas web… Hoy en día existen infinidad de canales que nos permiten consumir la información concreta que buscamos de forma inmediata.
Esto ha provocado que los medios de masas hayan perdido fuerza, ya que al haber tantas alternativas, menos personas consumen la información desde los medios tradicionales.
Además, a muchas marcas ya no les sale rentable anunciarse en estos medios: el alcance es mucho menor, al igual que el impacto que tienen. Las marcas han empezado a apostar por otras formas de marketing que puedan llegar a su público de la mejor manera posible. Y no solo eso. Buscan impactar de una forma mucho más personalizada y profunda de lo que venía haciendo hasta ahora.
El marketing sensorial está dando grandes resultados a las marcas que lo aplican. Y es que sus posibilidades son inmensas y su enfoque es radicalmente distinto. Veamos a grandes rasgos las diferencias entre el marketing sensorial y el marketing de masas:
Habiendo visto las diferencias entre el marketing de masas y el marketing sensorial, uno puede intuir en qué se fundamenta el segundo y por qué está teniendo tanto éxito. Ahora lo veremos con más detenimiento.
El marketing sensorial tiene como punto de partida el cerebro de cada uno de los usuarios. Comprende que cada dato que emite una marca llega al cerebro del consumidor. Allí se procesa, se relaciona con otras experiencias y se le da una carga emocional, obteniendo como resultado una experiencia sensorial totalmente individual. Por ello, los sentidos se convierten en la mejor manera de atraer la atención y generar las emociones más propicias para una consideración positiva de la marca y la fidelización de los clientes.
Dicho de otra forma, el marketing sensorial tiene como misión conseguir que el consumidor viva una experiencia valiosa, emocionante y placentera; y lo logra al utilizar herramientas que permiten tratar con los clientes de una forma mucho más personal, íntima y profunda.
Mediante diferentes experiencias sensoriales es posible impactar de forma directa a aquellos consumidores que conectan con esos mismos valores y personalidad, creando una imagen de marca potente y memorable.
Este cambio de enfoque es muy importante porque hace referencia a lo que los usuarios esperan hoy en día de lo que consumen. Antes, los usuarios apreciaban especialmente la funcionalidad de aquello que compraban. Ahora, aprecian todavía más las sensaciones que les genera. Proyectan e imaginan cómo se sentirán al adquirir ese producto o servicio, y se anticipan a las experiencias que les pueda hacer vivir.
El marketing sensorial trabaja todos los sentidos humanos: tacto, oído, olfato, audición y gusto. Por tanto, lo ideal es trabajar estos sentidos independientemente aunque, por supuesto, éstos deben quedar unidos en una estrategia común y coherente.
Dentro del marketing sensorial, el marketing olfativo es una de las piezas fundamentales y de mayor importancia, ya que estimula el sentido con más capacidad para evocar emociones y sensaciones: el olfato. Contacta con nosotros para iniciar tu estrategia de marketing olfativo.