En el artículo de hoy hablaremos sobre las mejores fragancias para tiendas de zapatos, pues es un sector que puede sacar muchísimo partido a los aromas para aumentar sus tasas de venta y la fidelización de sus clientes.
Cuando se trata de aromatizar tiendas de zapatos, son muchos los factores que debemos tener en cuenta. Solemos empezar por analizar la personalidad de la zapatería. ¿Se trata de una zapatería de estilo sofisticado y elegante? ¿Es una zapatería de estilo industrial y urbano? ¿Se trata de una zapatería juvenil y colorida?
Esta información es muy importante, porque el marketing olfativo en tiendas de zapatos debe estar en armonía con los demás elementos de marketing: el escaparate, la iluminación, la decoración del interior de la tienda… Si se trata de una zapatería elegante, con zapatos de precio medio-alto y estilo formal, funcionarán mejor un tipo de fragancias que otras. En cambio, para zapaterías infantiles o juveniles, nos decantamos por aromas atractivos para ese público y coherentes con el estilo del establecimiento.
Cuando conocemos bien el público al que se dirige la tienda de zapatos y el estilo y personalidad del establecimiento, podemos empezar a desarrollar la fragancia ideal para esa tienda de zapatos en concreto.
En general, las fragancias para zapaterías infantiles suelen ser frescas y dulces. Un tipo de aroma que funciona muy bien es el de la mandarina u otros cítricos similares como la lima o el pomelo. Los cítricos son aromas muy energizantes y llenos de vitalidad, por lo que conectan muy bien con el público de las zapaterías para niños.
Los aromas afrutados se pueden acompañar de notas que aporten más profundidad y que transmitan los valores de la zapatería. Por ejemplo, aromas amaderados o musgados serán ideales para tiendas de estilo eco o minimalista, y aromas florales como el jazmín o la rosa funcionarán muy bien en tiendas de estilo romántico.
Otro aroma que le va muy bien a las tiendas de zapatos para niños es el aroma del jabón de marsella, que en comunión con aromas dulces como la vainilla o la canela, ofrecen un ambiente muy relajado y familiar al establecimiento. Eso favorece que los clientes permanezcan más tiempo en la tienda y se prueben más zapatos. Además, contribuye a que la experiencia de compra se recuerde como positiva y agradable.
Por supuesto, no podemos olvidarnos del aroma a chicle. Aunque se viene utilizando mucho en todo tipo de tiendas infantiles, es realmente efectivo. Atrae a grandes y pequeños, y despierta sensaciones de curiosidad y apertura. Para personalizar la fragancia, es conveniente añadir al aroma otras notas olfativas que le den una personalidad única.
Generalmente, las zapaterías para adultos atienden tanto a hombres como mujeres, y muchas veces tienen modelos para todas las edades y gustos. Por eso conviene decantarse por fragancias discretas y neutrales. No recomendamos apostar por fragancias demasiado florales, pues no conectarían con la mayoría de hombres. Tampoco debemos abusar de las notas amaderadas, ya que pocas mujeres se sentirían identificadas.
Por suerte, hay muchas combinaciones posibles que integran elementos femeninos y masculinos a la perfección. Así podemos crear aromas que agradan a ambos sexos por igual.
En general, los aromas afrutados suelen ser agradables para todos los públicos y funcionan muy bien como fragancia para tiendas de zapatos. Aromas como el melón, la manzana o el melocotón, por ejemplo, atraen tanto a hombres como a mujeres, y generan sensaciones de vitalidad y alegría.
Como siempre, es importante combinar estos aromas con otras notas que le den mayor profundidad y tengan coherencia con la decoración del establecimiento y su personalidad. Por ejemplo, se pueden añadir notas especiadas como el cardamomo, el almizcle o la nuez moscada para crear la combinación perfecta.
Otra estrategia muy interesante es aprovechar el color identitario de la tienda de zapatos para buscar la fragancia que se asocia a ese color. Si una zapatería tiene como color principal el verde, podríamos apostar por fragancias como la hierbabuena, el vetiver, la gardenia o el limón como notas principales. En cambio, si la zapatería destaca por sus tonalidades azuladas, nos decantamos por aromas marinos y frescos, junto con notas de arándano, jazmín y cedro.
De esta manera logramos que los clientes conecten rápidamente con lo que la tienda de zapatos desea transmitir. Un aroma convenientemente elegido hará que se sientan a gusto en el establecimiento, y facilitará que recuerden la zapatería y la asocien a las sensaciones positivas que provoca el aroma.
Como ves, no hay una única fragancia para tiendas de zapatos. Cada establecimiento y cada marca tiene su propia identidad. Se trata, por lo tanto, de encontrar el aroma que va en sintonía con la personalidad de tu tienda de zapatos.
Para ello, es esencial contar con expertos en marketing olfativo que puedan desarrollar un aroma único, inconfundible y totalmente coherente a lo que deseas transmitir en tu tienda.