El marketing olfativo es una rama del marketing sensorial que se centra en el olfato. Por medio del olor se pueden transmitir multitud de sensaciones que mejoren la reacción de los que perciben el olor y, por lo tanto, mejorar las ventas notablemente. Te explicamos cómo es la experiencia de un consumidor si utilizas marketing olfativo en tu negocio.
Cuando un cliente entra en un local, ya sea una tienda un hotel o cualquier ambiente comercial, en el que se ha tenido en cuenta desarrollar una estrategia de marketing olfativo, lo primero que siente es sorpresa. Sus sentidos se despiertan y comienza una reacción que enriquece la compra. Ahora el cerebro trata de comprender este aroma y comienza a recordarlo para reforzar la imagen de marca.
Si la persona lo identifica, los recuerdos comienzan fluir y se genera en ella un sentimiento de alegría, de emoción o de nostalgia, algo diferente en cada caso particular. Si el sentimiento es agradable, el consumidor tiene necesidad de mantenerse en el local y asocia los productos a cosas buenas.
Si no hay recuerdos, en ese momento se crean. Cuando el cliente se marche, recordará el olor y lo asociará al establecimento en la que ha estado. Es decir, el consumidor recordara la experiencia en la tienda y querra volver.
En todos los casos, sea que se recuerde o no el olor, el que se utilice un aroma incrementa la confianza en la marca y el producto. Cuando el consumidor ve dos productos similares en lugares diferentes, tiende a decantarse por aquel que olía mejor o estaba en un lugar con un aroma agradable.
Existe una razón por la que el marketing olfativo tiene un efecto tan notable en los consumidores. A diferencia de la vista, el tacto, el gusto o el oído, el olfato influye directamente en el sistema límbico. En este se encuentran el tálamo, el hipotálamo y la amígdala cerebral, que se encargan de gestionar los estímulos olfativos, así como las emociones, la memoria, la excitación sexual y el apetito.
Así que, si se utilizan bien los olores, se pueden manipular todos estos factores. Gracias al olor puedes despertar las emociones deseadas en cada cliente. Si quieres evocar sensaciones positivas, tan solo tienes que escoger aquellos olores que son comunes y agradables para todos los que visiten el lugar o adquieran el producto.
En vista de todo en lo que influye el marketing olfativo, es normal que todos los negocios le reserven una parte importante de su estrategia comercial. Lo mejor es confiar en las recomendaciones y los productos que facilitan los profesionales.
Pero no solo los pequeños negocios se pueden aprovechar del marketing olfativo. Existen equipos de aromatización que se instalan que se instalan en las máquinas de aire acondicionado de las grandes superficies. Así crean su propio odotipo y contribuyen a que los clientes no se quieran marchar.