
El análisis DAFO, o SWOT en inglés, es un análisis que permite ver de manera global la situación actual de la empresa y planear una estrategia para seguir creciendo y superando los obstáculos.
Las siglas responden a las cuatro áreas que se analizan: Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades. De hecho, el análisis DAFO consiste en realizar una matriz en la que se analizan, por un lado, los aspectos internos de la empresa (fortalezas y debilidades), y por el otro, los aspectos externos (oportunidades y amenazas).
Este análisis se empezó a aplicar en los años setenta en Estados Unidos, y hoy en día sigue siendo un sistema muy utilizado por todo tipo de empresas, pues es sencillo de realizar y con él se obtiene una información objetiva muy útil para plantear la estrategia empresarial. Por ello, el análisis DAFO es la práctica más que recomendada para toda empresa que quiera enfocarse a aumentar su rentabilidad, mejorar su funcionamiento y posicionarse adecuadamente en el mercado.
En este artículo veremos a grandes rasgos cómo hacer un análisis DAFO, ya se trate de una empresa grande o pequeña.
Cómo hacer un análisis DAFO
Análisis interno: Fortalezas y Debilidades
El primer paso consiste en realizar un análisis interno de la empresa. El objetivo es encontrar sus Debilidades y Fortalezas, las cuales se irán anotando en el espacio correspondiente dentro de la matriz. Para ello, conviene analizar las siguientes variables de la forma más extensa y objetiva posible:
- Producción: todo lo relacionado con los costes de producción, la calidad de los productos, la innovación de los mismos, etc.
- Marketing y ventas: estudiar lo relativo a la publicidad, los precios de productos/servicios, procesos y costes de distribución, posicionamiento, cuota de mercado, etc.
- Organización: Como es la estructura de la empresa, la dirección, la jerarquización y departamentos, la cultura empresarial…
- Personal: valorar aspectos como la formación, la remuneración, los procesos de selección y los perfiles profesionales disponibles.
- Finanzas: tener en cuenta la liquidez de la empresa, su endeudamiento, su rentabilidad, etc.
Cada aspecto se analizará objetivamente y se anotará en el lugar que le corresponda según si supone una debilidad o a una fortaleza para la empresa. Este no es momento de juzgar o buscar soluciones. Más adelante se procederá a analizar los datos detenidamente e implementar estrategias capaces de corregir las debilidades e impulsar las fortalezas.
Análisis externo: Oportunidades y Amenazas
Seguidamente, se realizará el análisis externo, con la misión de detectar las Oportunidades y las Amenazas que la empresa tiene ante sí. Los aspectos externos no dependen de la empresa, pero le afectan de un modo u otro. Por eso es importante tenerlos en cuenta con el objetivo de adaptarse de la mejor manera posible.
Los aspectos externos que conviene analizar son los siguientes:
- Mercado: Estudiar el target de la empresa, qué necesidades tiene, cómo compra, cómo evoluciona la demanda, etc.
- Competencia: Conocer la situación de las otras empresas, su posicionamiento, sus precios, la calidad de sus productos, etc.
- Sector: A un nivel más global, qué tendencias se dan en el sector (evolución, normativas, proveedores, distribuidores…)
- Entorno: De forma todavía más amplia, qué aspectos pueden tener alguna influencia en la empresa: situación económica actual, legislación, tecnología, sociedad, política…
Igual que ocurría con los aspectos internos de la empresa, se trata de ir colocando cada aspecto analizado en su espacio correspondiente según se considere una amenaza o una oportunidad para la empresa.
Cómo preparar un plan estratégico gracias al análisis DAFO
Con toda la información plasmada en la matriz DAFO, se procederá a realizar un diagnóstico estratégico. Dicho de otro modo, se tratará de aprovechar las oportunidades, corregir las debilidades, protegerse frente a las amenazas y apoyarse en las fortalezas.
Al unir los diferentes cuadrantes entre ellos, podremos sacar algunas ideas para planear diferentes estrategias:
Utilizar las fortalezas para superar las amenazas (F+A).
Por ejemplo, una empresa podría aprovechar que tiene contactos en el extranjero (fortaleza) para abrir mercado allí y así no verse afectado por la crisis económica que se está dando en su país (amenaza).
Utilizar las fortalezas para aprovechar las oportunidades (F+O).
Una tienda detecta que la zona comercial donde está ubicada supera el número de visitantes año tras año (oportunidad). Podría aprovechar su capacidad de inversión (fortaleza) para iniciar una estrategia de marketing olfativo y así atraer a más público hacia su tienda.
Reducir las debilidades y superar las amenazas (D+A).
Esta es una estrategia de supervivencia, y se trata justamente de sobrevivir pese a las dificultades. Imaginemos una empresa que está muy endeudada (debilidad). Al ver que existe una crisis económica que afecta especialmente a su sector (amenaza), puede verse obligada a prescindir de una parte de su plantilla hasta que la situación mejore y su deuda se reduzca.
Superar debilidades aprovechando oportunidades (D+O).
Una empresa podría darse cuenta de que el mercado está demandando un producto (oportunidad) que ella aún no produce. También observa que actualmente no puede producirlo porque le falta el perfil profesional adecuado (debilidad). Esta oportunidad le lleva a contratar a los profesionales que necesita y producir el producto que le demanda el mercado, haciéndose así más competitivo y mejorando su facturación.
Esperamos que este artículo te haya sido útil para profundizar en qué es el análisis DAFO, cómo se realiza y cómo se utiliza para planear estrategias a corto, medio y largo plazo.
CUÉNTANOS QUE NECESITAS
TE PUEDE INTERESAR…
¿Para qué sirve la citronela? Te lo contamos
La citronela es una planta originaria de Asia que se ha utilizado durante siglos por sus propiedades medicinales y su efecto repelente de insectos. En este artículo, te contamos para qué sirve la citronela y cómo puedes utilizarla para aprovechar sus beneficios.
Estos son los mejores ambientadores mikado del mercado
Los ambientadores mikado son una excelente opción para mantener tu hogar u oficina con un aroma agradable y fresco. Estos ambientadores consisten en un frasco de vidrio que contiene una mezcla de aceites esenciales y una varilla de ratán que se sumerge en la mezcla para liberar el aroma en el aire.